A veces las pesadilla se convierten en realidad, a veces no sabemos como salir de una situación incomoda que nos genera la vida misma, nos pone delante como prueba o como bifurcación del camino.
El maltrato no tiene que ver solo con el cuerpo: el acoso entra en el alma y muchas veces es difícil quitárselo de encima, ya no sabemos quien es quien en la relaciones de poder que se crean una vez que el amor se ha ido..
En esta pieza se pretende hacer reflexionar sobre la violencia psicológica, que considero como la mas fuerte forma de maltrato entre personas. Las relaciones toxicas están impregnadas de conflictos sutiles pero aditivos, que muchas veces no nos dejan ver la luz al final de la galería: esta luz si existe y esta pieza intenta motivar a todas aquellas mujeres que la están buscando
El cuerpo de la mujer y la reivindicación de hacer con ello lo que queramos, sin ningún tipo de imposición o suplicio es el centro de mi investigación; muchísimas mujeres en el mundo padecen maltrato, acoso o mueren por parte de sus carnífices este corto esta dedicado a todas ellas. Y a las que todavía pueden hacer algo para salir adelante, reapropiándose de sus cuerpos y sus mentes y reafirmarse como mujeres en esta sociedad.